Hola, mi nombre es Mari Luz Gutiérrez, tengo 51 años y trabajo como autónoma, lo cual quiere decir que si estoy de baja, cobro una insignificancia.
Hace unos años, en unas Navidades, estábamos celebrando una comida familiar y cuando fregaba una de las copas de cristal, ésta se rompió y me cortó en la muñeca derecha como si fuera una navaja de filo súper afilado. Me produje un corte limpio, profundo, que me hizo casi perder el conocimiento y que se llevó por delante uno de los tendones de la mano, en concreto, el de mi dedo índice de la mano derecha.
En urgencias me dijeron que tenía que ser operada para reparar el tendón, y que es una intervención en la que la habilidad del cirujano tiene mucho que ver con el éxito de la misma y la recuperación de la movilidad del dedo.
Me informé sobre los distintos especialistas en Madrid y al final, elegí al Doctor Homid Fahandezh-Saddi, puesto que me dijeron que era un traumatólogo que desde el principio de su carrera, se había especializado en la cirugía de la mano, cirugía que es muy compleja. Y que sus pacientes quedaban muy contentos con sus resultados.
Así que el Doctor Fahandezh me operó unos días más tarde. Yo estuve adormilada por lo que no me enteré de la intervención. Todo fue bien. Pero luego viene el post-operatorio y la rehabilitación y eso lleva su tiempo…
Durante dos meses me dediqué a recuperar la movilidad de mi dedo (¡parece increíble!), ejercitando los movimientos que me indicaba el Fisio-Terapeuta, dos meses de baja concentrada en mover mi dedo. ¡Y ahí es cuando me di cuenta de la elección tan acertada que había realizado al elegir a este cirujano traumatólogo, el Doctor Homid Fahandezh!
Mientras que otros pacientes con los que coincidía eran incapaces de avanzar en la movilidad de sus dedos (por un corte en los tendones similar al mío), yo, cada día iba mejorando de una forma espectacular. Mi fisio me informó de que reparar un tendón roto es una “habilidad sumamente compleja” y que el cirujano tiene que saber exactamente la tensión con la que debe de dejar el tendón para que luego éste sea capaz de hacer mover los dedos con la misma “finura” que lo hacía antes del corte…
Yo, no me gano la vida con mis manos, pero aunque hubiera sido guitarrista, no hubiera notado diferencia alguna con mi situación inicial. Mi dedo se flexiona perfectamente, no existe ninguna diferencia con el movimiento y flexión de los otros dedos, guarda la misma fuerza y destreza y la mayoría de las veces, ni me acuerdo de cuál es el dedo que un día no podía mover…El resultado fue INCREÍBLE.
Respecto a la cicatriz, ha quedado tan fina e integrada a las líneas naturales de mi mano que tampoco es perceptible a primera vista. Hay que fijarse con detalle e ir en busca de la cicatriz para seguir el corte que con su gran habilidad y destreza, practicó este gran especialista de la mano que es el Doctor Homid Fahandezh-Saddi.
Por todo ello, querría dar las gracias al Doctor Fahandezh, por su gran dedicación a este campo de la ciencia de la Cirugía de la Mano, tan compleja, puesto que requiere la destreza de un verdadero artesano, y que otros especialistas descartan porque buscan la fama y el dinero con otras cirugías más comunes y sencillas….Muchas gracias por su gran dedicación, profesionalidad, y por cuidar de ese órgano tan fundamental en nuestro día a día.
Espero que mi testimonio ayude a otras personas que se puedan encontrar en mi caso, ante la duda de elegir un buen cirujano. Yo se lo recomiendo al 100% y me volvería a poner en sus manos si por desgracia me viera en una situación similar.
¡Enhorabuena y muchas gracias de nuevo, Doctor Homid Fahandezh-Saddi!
Atentamente.
Mariluz Gutiérrez.