Las lesiones traumáticas del miembro superior, presentan una gran incidencia en urgencias. Su frecuencia, hace que el tratamiento inicial sea importante, ya que en muchas ocasiones de ello va a depender que la evolución y recuperación funcional sean óptimas.
El objetivo es facilitar el diagnóstico y actitud inicial ante los distintos tipos de fractura, luxación de hombro o lesión tendinosa, haciendo un repaso de la patología del miembro superior más frecuente que se recibe en urgencias.
Fracturas de la clavícula
Las fracturas de clavícula son lesiones muy frecuentes, especialmente en niños tras caídas desde una bicicleta sobre su hombro o sobre la mano extendida.
El paciente acude a la urgencia presentando mucho dolor e impotencia funcional en su hombro, con una actitud de defensa (brazo pegado al cuerpo sujetándolo con la otra mano.)
Conoce el testimonio de un paciente intervenido de fractura de clavícula
Actitud ante una sospecha de fractura clavícula
Es importante hacer una correcta anamnesis y exploración física, para descartar lesiones asociadas. No hay que olvidar que muchas veces se trata de traumatismos deportivos o caídas de moto-bicicleta, y podemos tener asociadas fracturas costales.
Una vez explorado al paciente hay que realizar radiografías para confirmar el diagnóstico de sospecha.
Si se trata de un accidente de tráfico, solicitar RX anteroposterior de hombro y/o clavícula, parrilla costal y otras exploraciones en función de la sintomatología.
Actitud ante una fractura de clavícula
Hay que evaluar la localización de la fractura de clavícula y las lesiones asociadas para optar por el tratamiento adecuado. Así, distinguiremos entre:
- Fracturas del 1/3 medio de clavícula, desplazadas y no desplazadas
- Fracturas del 1/3 distal no desplazadas
- Fracturas del 1/3 distal desplazadas
Las fracturas del 1/3 medio de clavícula, desplazadas y no desplazadas
Habitualmente se tratan mediante un vendaje en 8. Para ello se pide al paciente que ponga sus manos en la cintura y que lleve los hombros hacía atrás, a la vez que se ajusta el vendaje.

Es importante explorar el estado neurovascular tras la colocación del mismo. Si aparecen parestesias, se pide al paciente que eleve sus brazos y si persisten se afloja un poco el vendaje.
Se revisa al paciente a la semana y es frecuente que haya que retensar el vendaje en 8. El tiempo que lo mantenemos va desde las 3 semanas en niños a las 4-5 semanas en adultos.
El tratamiento quirúrgico se realiza en fracturas muy desplazadas, cuando la fractura amenaza la piel con riesgo de provocar un decúbito, o en deportistas en los que la cirugía acorta de forma considerable el tiempo de reposo.
También se opta por la cirugía cuando se trata de un hombro flotante.


Las fracturas del 1/3 externo de la clavícula no desplazadas
Se tratan mediante un vendaje de Velpeau. No se suele colocar un vendaje en 8, ya que podría provocar un desplazamiento anterior de la clavícula. Es importante insistir en la necesidad de movilizar el codo para evitar rigideces.
Las fracturas del 1/3 externo de clavícula desplazadas
En este grupo suele haber asociada una lesión de los ligamentos conoide y trapezoide.
Está indicado un tratamiento quirúrgico sí:
- Desplazamiento importante de la fractura.
- Hombro flotante.
- Compromiso cutáneo por la fractura. El tratamiento consiste en la reducción y síntesis de la fractura mediante una placa o agujas de Kirschner con reparación de los ligamentos conoide y trapezoide si éstos se encuentran rotos.


Importante
Ante una fractura de clavícula, hay que descartar lesiones asociadas especialmente en tórax y hombro, y evaluar de una forma minuciosa el estado neurovascular.
Fracturas de escápula
Las fracturas de escápula, son raras y afectan con mayor frecuencia al cuerpo de la escápula. Se producen ante traumatismos de alta energía por lo que hay que descartar lesiones asociadas.
Hay que valorar si la fractura afecta al cuerpo, espina de la escápula o cuello:
- Fracturas del cuerpo de la escápula, son las más frecuentes. Habitualmente se tratan mediante un cabestrillo.
- Las fracturas de la espina de la escápula, suelen asociarse a fracturas del cuerpo y se tratan también con un cabestrillo.
- Las fracturas del cuello de la escápula no desplazadas habitualmente se tratan de forma conservadora, optando por un tratamiento quirúrgico si se trata de una fractura desplazada, angulada o englobada dentro del contexto de un hombro flotante.

Lesiones de la articulación acromioclavicular
Se producen al igual que las fracturas de clavícula, tras caídas o traumatismos sobre el hombro. Lo más frecuente es tras traumatismos directos sobre el hombro con el brazo en abducción.
Un punto importante de la anamnesis es preguntar al paciente donde tiene dolor, y si el paciente selecciona un punto a punta de dedo, probablemente se trate de una lesión que afecta a dicha articulación.
Exploración
Dolor en la articulación acromioclavicular (AC), que aumenta a la abducción pasiva. Hay que objetivar si existe una deformidad por una subluxación o luxación de la articulación. Si ésta existe, probablemente haya un signo de la tecla positivo (depresión de la clavícula a la compresión).
Un punto importante de la exploración es valorar si la clavícula se encuentra elevada únicamente o si presenta un desplazamiento posterior, de cara al tratamiento. Hay que valorar siempre el estado neurovascular.
Clasificación de las lesiones de articulación acromioclavicular
- Lesión AC tipo I: Distensión de los ligamentos AC sin rotura ligamentosa.
- Lesión AC tipo II: Subluxación de la Articulación AC, con rotura de los ligamentos AC e integridad de los coracoclaviculares (CC).
- Lesión AC tipo III: Rotura de los ligamentos AC y CC.
- Lesión tipo IV: Existe un desplazamiento posterior de la clavícula.
- Lesión tipo V: es como la tipo III pero con un desplazamiento muy marcado.
- Lesión tipo VI: Luxación inferior de la clavícula distal.
Las tres lesiones más frecuentes son las tipo I, II y III.

Diagnóstico de imagen
- Radiología anteroposterior de hombro. Hay que valorar si hay o no desplazamiento en la AC y si la distancia entre la coracoides y clavícula es normal o está aumentada.
- Proyección axial lateral del lado sano y del lesionado.
- Radiografías de estrés. Se utiliza si hay dudas de que se trate de una luxación AC tipo II o tipo III. Se colocan 5 Kg de peso en ambas manos pegadas al cuerpo y se realiza una RX AP de ambos hombros. Si es una luxación tipo II o III, se incrementa el espacio desde la coracoides a la clavícula. Si la AC está subluxada será una tipo II y si está luxada, una tipo III.
Tratamiento de las lesiones de la articulación acromioclavicular
- En las lesiones de tipo I y tipo II, el tratamiento es conservador mediante un cabestrillo, hielo local y AINEs.
- En las lesiones tipo III podemos optar por un tratamiento conservador y un tratamiento quirúrgico.
- La decisión depende de varios factores: Actividad deportiva, actividad laboral (trabajar con brazos por encima de los hombros) y por la prominencia de la clavícula con compromiso cutáneo.
Si el paciente no cumple los factores anteriores, el tratamiento es conservador mediante un Sling simple o vendaje tipo Robert Jones para bajar la clavícula. Hay que avisar al paciente, ya que le quedará una deformidad por el desplazamiento de la clavícula con respecto al acromion.
En este grupo de pacientes no existen diferencias funcionales a largo plazo entre el tratamiento conservador y quirúrgico como demuestran muchos estudios.
Cuando el paciente es deportista y trabaja mucho tiempo con brazos por encima del hombro, se opta por la cirugía. Ésta consiste en la reducción de la clavícula, la sutura de los ligamentos coracoclaviculares y la estabilización de la articulación AC con la ayuda de agujas de Kirschner. - Las lesiones tipo IV, V y VI son quirúrgicas por definición.
Importante
Descartar las lesiones tipo IV, a menudo se pueden confundir con las tipo III. La principal diferencia es que la clavícula en las tipo IV está desplazada a posterior. Para ello solicitar TAC.
Avisar al paciente de la deformidad residual en las tipo III y de la posibilidad de cirugía si el dolor persiste (extirpación de 1/3 distal de clavícula).
Lesiones de articulación esternoclavicular
Son lesiones raras.
El paciente presenta dolor en dicha articulación, que en ocasiones le dificulta la respiración.
A la exploración se evidencia dolor en la articulación con una deformidad de la misma con una luxación anterior/ posterior de la esternoclavicular.

Diagnóstico de las lesiones de articulación esternoclavicular
Radiografía tórax PA y lateral (en ocasiones se ve el desplazamiento).
Si se trata de un traumatismo de alta energía, si la RX no es concluyente, podemos solicitar un TAC de tórax que nos dará el diagnóstico. Hay que prestar especial atención a las luxaciones posteriores de dicha articulación, debido a la proximidad de las estructuras vasculares.
Tratamiento de las lesiones de articulación esternoclavicular
Tratamiento conservador
Es lo habitual. Cuando existe un esguince, una subluxación o una luxación anterior de la esternoclavicular, el tratamiento será conservador mediante hielo local, AINEs, fisioterapia respiratoria.
Si se produce un desplazamiento posterior hay que intentar reducir la luxación por métodos cerrados, para evitar la lesión potencial de los vasos subclavios. No es infrecuente que esta lesión pase desapercibida y acuda el paciente de forma diferida a la consulta.
Tratamiento quirúrgico
Cuando el paciente tiene una luxación posterior con clínica neurovascular asociada.
Otra indicación es cuando el paciente se queja de dolor que no cede con analgésicos ni tratamiento rehabilitador. En estos casos, se precisa de la resección del 1/3 proximal de la clavícula y estabilización con injerto tendinoso.
Fracturas del húmero proximal
Las fracturas de húmero representan el 5% de las fracturas en la población adulta, de ellas el 75%, se localizan en el tercio superior y son muy frecuentes en ancianos influenciadas por la osteoporosis.
En jóvenes se producen por traumatismos de alta energía.
Clínica en fracturas de húmero
Dolor, impotencia funcional y hematoma sobre el hombro lesionado. Suelen llevar el codo pegado al cuerpo, con una rotación dolorosa. Suele haber una oposición a la movilidad del brazo.
Es frecuente la aparición de un hematoma de Hennequin, que es un hematoma que aparece a las 48 horas en cara antero-externa de hombro por debajo del deltoides.
Diagnóstico de las fracturas de húmero o luxación de hombro
Hay que solicitar la serie de trauma: RX anteroposterior de hombro y lateral en el plano escapular y en la proyección axilar.

Clasificación de las fracturas de húmero
Utilizamos la clasificación de Neer, que se basa en las relaciones existentes entre los cuatro segmentos anatómicos: troquín, troquíter, segmento articular y diáfisis humeral.
Dividen las fracturas en función de los desplazamientos de uno o más de estos segmentos.
Se consideran fracturas desplazadas las que tienen dos, tres, cuatro segmentos, la fractura luxación, la fractura articular, así como cuando entre los trazos fracturarios exista separación mayor de 1 cm, o angulación de más de 45º.
Tratamiento de las fracturas de húmero o luxación de hombro
En las fracturas de húmero son importantes las siguientes variables:
- Tipo de fractura
- Edad
- Grado de desplazamiento
- Existencia de luxación asociada
El 80-85% de las fracturas del húmero proximal son de un solo fragmento, impactadas y no desplazadas. El 20% restante son fracturas inestables, desplazadas o con afectación articular que requieren un tratamiento más complejo.
Fracturas de húmero proximal no desplazadas
Inmovilización con cabestrillo o Velpeau colocando el hombro en aducción y en ligera rotación interna y el codo flexionado y pegado al tronco durante, al menos, tres semanas.
Existen buenos resultados en cuanto a la consolidación y la recuperación funcional con la aplicación de este tipo de tratamiento siempre que se asocie a fisioterapia precoz.
Fracturas húmero desplazadas o fractura – luxación de hombro
En una fractura o luxación de hombro especialmente en pacientes jóvenes está indicado el tratamiento quirúrgico.
Este puede ir desde una reducción abierta y osteosíntesis (siempre que se puede especialmente en pacientes jóvenes) a la artroplastia de sustitución de hombro cuando se trata de una lesión con 4 o más fragmentos en pacientes con huesos con osteoporosis.



Complicaciones en las fracturas de húmero
- Rigidez articular.
- La pseudoartrosis (frecuente sí hay fracturas desplazadas en dos o más segmentos).
- La consolidación en mala posición, la osificación heterotópica y la necrosis avascular.
Importante
La posible existencia de lesiones asociadas, obliga a explorar el plexo braquial, los pulsos periféricos y el nervio circunflejo que da sensibilidad a la porción anterolateral del hombro.
Luxación de hombro
La articulación glenohumeral es la que posee mayor grado de movilidad del aparato locomotor y eso hace que junto a su peculiar anatomía, donde la glenoides sólo engloba un tercio de la cabeza humeral, sea la articulación que se luxe con más frecuencia.
Clasificación de las luxaciones del hombro
- Luxación de hombro anterior: Es la más frecuente.
- Luxación de hombro posterior: Más dolorosa y más frecuente en ancianos.
- Luxación de hombro superior: Muy rara. Requiere fractura asociada.
- Luxación de hombro erecta/inferior: acude en “saludo hitleriano”.
Clínica en la luxación de hombro
Luxación de hombro anterior
- Hay dolor intenso, impotencia funcional y a veces parestesias en el territorio del nervio circunflejo (hipoestesia en “insignia de regimiento”).
- Hombro en charretera que se manifiesta como una “depresión en hachazo” por debajo del acromion y clavícula. El brazo con el hombro luxado aparece típicamente en ligera abducción y rotación externa, con el codo flexionado 90 grados y sujetado por la mano contralateral.
- Es muy importante la exploración neurovascular distal y descartar la posibilidad de fracturas asociadas (troquíter,…).

Luxación de hombro posterior
Este tipo de luxación de hombro es frecuente en ancianos. Hay que sospecharla especialmente cuando el paciente presenta dolor en el hombro tras un ataque epiléptico o una descarga eléctrica. Es muy importante la sospecha diagnóstica y la radiología para el correcto diagnóstico.
Pruebas de imagen
RX transtorácica
Indica la posición de la cabeza humeral respecto a la glena (anterior, posterior, superior e inferior) aunque en la actualidad, se recurre más a la proyección en y de escápula.
RX anteroposterior
Evidencia el desplazamiento anterior e inferior de la cabeza humeral en las luxaciones anteriores y la imagen de bombilla en las luxaciones posteriores.

Tratamiento en luxación de hombro
- Si hace pocas horas de la luxación de hombro: Hay que realizar una reducción urgente de la misma habitualmente con maniobras de reducción en la urgencia.
- La maniobra de Milch (abducción progresiva con rotación externa de Miembro superior, y penduleo suave con tracción axial del brazo) obtiene muy buenos resultados, es indolora y evita las fracturas que con otras técnicas pueden aparecer.
- Si el paciente es muy musculoso o no colabora, se le puede administrar un diazepam 5 mg como relajante asociado a analgesia IV para ayudar a la reducción.
- Si se trata de una luxación con tiempo de evolución o ante un fracaso de la reducción de la luxación de hombro en la urgencia, está indicado realizar una reducción en quirófano en principio cerrada con las mismas maniobras de reducción. únicamente y es raro, cuando no se consigue una reducción cerrada, hay que optar por una reducción abierta de la misma.
- Lograda la reducción puede ser inmovilizado con Velpeau o cabestrillo durante tres o cuatro semanas seguido de fisioterapia.
Importante
Descartar lesión del nervio circunflejo.
Siempre hacer RX previa a manipulación para descartar fracturas asociadas.
Si hay fractura asociada, es mejor ir directamente a la reducción bajo sedación en quirófano.
Tener claro que la luxación de hombro es una urgencia y que no se puede diferir su tratamiento.